Hace ya algún tiempo que el Vino Natural está de lleno en el candelero, tiempo suficiente para comprobar que no se trata de una moda pasajera, sino que han venido para quedarse con nosotros. Hoy voy a contarte todo lo que he podido aprender sobre este tipo de vinos ¿te animas a saber más de ellos?
¿A qué se debe que los Vinos Naturales tenga tanta presencia en estos días?
En estos tiempos que corren, cada vez estamos más concienciados con el medio ambiente. Somos mas conscientes de los efectos de un cambio climático que parece haber llegado ya a nuestros días. Esta toma de conciencia hace también que la apliquemos a la cotidianidad de nuestra vida. En este sentido, generalmente intentamos comprar más alimentos ecológicos, procedentes de pequeñas explotaciones y por supuesto productos en los que el hombre haya intervenido lo menos posible. Y es que el consumidor además ser consciente de la importancia de cuidar el medioambiente y de cuidarse a sí mismo. También tiene cada vez más conocimientos sobre los productos que consume.
Entonces, ¿Qué es un Vino Natural?
Pues llamamos así al vino que se obtiene con la mínima intervención del hombre posible. No solo en el proceso final de elaboración, sino también en el cultivo del viñedo y la obtención de las uvas. Estos vinos son como una especie de vuelta a los orígenes, con la práctica de una agricultura más respetuosa con el medio, la elaboración en la mayoría de ellos a través de métodos tradicionales que ya estaban prácticamente en desuso y por supuesto, la no adición de Sulfitos. Las bodegas que elaboran estos vinos, pretenden mostrar al consumidor una total transparencia en cuanto a cómo elaboran. Con ello pretenden generar confianza en sus potenciales clientes, transmitiendo el mensaje: “Se cuenta lo que se hace y se hace lo que se cuenta”. Por todas estas y más razones son vinos con una autenticidad y singularidad que hacen que el número de sus consumidores de multiplique día a día.
¿Qué esperas encontrar al beber un Vino Natural?
En los vinos blancos naturales es posible que te encuentres colores amarillos más intensos o incluso ambarinos. Estos colores van a variar en función de si el enólogo macera y cuánto tiempo lo haga, los hollejos con la pulpa. Los aromas tendrán características propias de la variedad y de su forma de fermentar: acero inoxidable, tinajas de barro, depósitos de hormigón o barricas de roble. En boca, van a ser vinos intensos, complejos y con persistentes finales.
En cuanto a los vinos tintos naturales, en color no van a distar nada de los vinos no naturales. Los aromas al igual que comento con los blancos van a depender de los diferentes procesos de elaboración. En boca, van a presentar características diferentes a los vinos no naturales. Es obvio que estas se van a ver condicionadas por la juventud y la crianza del vino. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no se han llevado a cabo ni correcciones ni adiciones, se han elaborado con una mínima intervención del hombre.